jueves, 10 de noviembre de 2016

Multífidos, bridas que nos ayudan.

 
Los Multífidos son músculos que hacen la función como de "bridas" ya que son pequeños pero sujetan perfectamente y proporcionan movilidad vertebral, forman la capa mas profunda de los músculos de la espalda. Se extienden de los arcos vertebrales a las apófisis espinosas.
 
PEQUEÑOS ... PERO MUY ÚTILES
 
   Cada Multífido conecta una media de 3 vértebras, y sirven para controlar los movimientos entre ellas. Son músculos pequeños, pero muy potentes, que permiten que el movimiento se realice de una manera más precisa que si sólo actuasen los músculos largos de la espalda.
 
   El Transverso Abdominal es el más profundo de los músculos abdominales y tiene un papel muy importante a la hora de estabilizar la columna lumbar. Aunque en el pasado tampoco recibió mucha atención, hoy en día los sistemas modernos de entrenamiento (y, especialmente, el método Pilates) centran gran parte del trabajo en su activación. Cuando se contrae simultáneamente con los multífidos forma una especie de faja interna que actúa estabilizando a la columna durante sus movimientos. Este patrón de activación (y, por lo tanto, de protección) está interrumpido en los pacientes con lumbalgia.
 
   No se sabe con certeza por qué estos músculos alteran su funcionamiento después de una lesión en la zona lumbar (o, a veces, por qué dejan de funcionar correctamente y dan lugar a la aparición de las lumbalgias), pero sí se sabe que la realización de ejercicios específicos  de Pilates centrados en la activación de estos músculos simultáneamente mejorará su capacidad para estabilizar a la columna, reducir la intensidad del dolor y mejorar la capacidad para llevar a cabo las tareas de la vida cotidiana a la vez que se incrementa el Control postural y la Conciencia del propio cuerpo.
 
   En próximas entradas de este blog,  veremos que ejercicios de Pilates que favorecen la activación de estos pequeños "jefes" de nuestra columna vertebral.
 
Mónica C.

lunes, 7 de noviembre de 2016

La pelota pequeña en pilates


Colaboración: ALICIA FERNANDEZ
 
Es habitual que los médicos recomienden la práctica de pilates para la gente con lesiones de espalda. A mis clases me llegan a menudo alumnos con distintas hernias a lo argo de la columna, artrosis, artritis y enfermedades degenerativas.
A la hora de realizarlos ejercicios, las hernias a nivel de lumbares o cervicales son las más problemáticas, ya que como sabéis los que practicáis esta disciplina de forma regular, existen muchos ejercicios donde la columna se flexiona, por ejemplo, series donde la espalda se apoya en la esterilla y las piernas están elevadas provocando dolor a nivel de la lumbar en gente con estos problemas, igual que algún ejercicio donde las cervicales estén en alto y se produzca sobrecarga en esta zona, sobre todo en principiantes que aún no hayan desarrollado su zona abdominal como determina el método.

Para todos los que sufráis de estas dolencias os diré que la solución no es abandonar la práctica, sino acompañar vuestras sesiones con la pelota pequeña de pilates. Los que usáis fitball ya habréis observado cómo la columna se reajusta adaptándose a la pelota.

Pues bien, con la pelota pequeña podemos observar cómo se recoloca la columna a un nivel más concreto. Si colocamos la pelota en la zona lumbar, o incluso en el trasero, podremos realizar esos ejercicios con piernas elevadas que nunca pensamos que podríamos hacer sin sentir dolor.
De igual forma, si la colocamos en la zona cervical, podremos hacer series de pesas que antes nos resultaban dolorosas y nos dejaban el cuello tan mal que hasta sentíamos mareos.

Existen otros problemas que podremos tratar con este gran aliado como la recuperación de flexibilidad tras operaciones de prótesis de cadera y rodilla, ya que podemos colocar la pelota bajo la rodilla operada y bajo el trasero para aliviar la sobrecarga y realizar así ejercicios para devolver la vida a nuestras articulaciones dañadas.

ALICIA FERNANDEZ,
ENTRENADORA PERSONAL
PROFESIONAL DE PILATES.